Hoy la agricultura se dirige inexorablemente hacia un incremento de productividad, necesario para alimentar a un mundo que crece en población y que demanda, cada vez más, calidad y seguridad en los alimentos.
Para poder responder a esta necesidad de producir más por unidad de superficie, de manera sostenible, en Bayer ponemos a disposición de nuestros clientes soluciones tecnológicas seguras, efectivas y sustentables en lo ambiental. Cada producto para la protección de cultivos atraviesa un exhaustivo control regulatorio para obtener su aprobación. Asimismo, en el marco de las buenas prácticas agrícolas, ofrecemos a productores programas de asesoramiento y capacitación para el manejo responsable de defensivos agrícolas.
No somos ajenos al debate público sobre el efecto de los productos de protección de cultivo sobre las personas y el medio ambiente. En ese sentido, reafirmamos nuestro convencimiento de que toda sustancia química debe ser medida en base a criterios de riesgo y no de peligro. El peligro no tiene en cuenta ni la dosis, ni la exposición, ni el buen uso. Un producto que es aplicado según las recomendaciones que figuran en su etiqueta no presenta ningún peligro para la salud humana y el medio ambiente.
Sin buenas prácticas, comunicación de buen uso, manejo adecuado de envases, calidad de depósitos, autocontrol dentro de nuestro sector, certificación de aplicaciones y receta fitosanitaria, estamos haciendo las cosas mal. Esta es la base para mostrar que tomamos en serio la licencia para operar que hoy nos demanda la sociedad. Debemos ser embajadores del buen uso de nuestro portfolio y, en ese sentido, sabemos sobre la necesidad de ser proactivos en la comunicación. Es por eso que nos esforzamos en proporcionar, tanto a la opinión pública como a las autoridades, información clara y equilibrada sobre lo que hacemos para cumplir, de manera responsable y sostenible, con esta enorme responsabilidad de alimentar al mundo.